A veces
si me detengo
cierro los ojos
y me siento
me descubro temblando
como una hoja de álamo
agitada por el viento
de mi miedo interno.
Un dado mágico gira y gira suspendido en el aire. Cae y rueda por el suelo danzando a brincos mostrando todas sus caras numeradas. Todas las opciones ruedan y saltan. Y mi destino se para esperando a que el dado detenga su marcha. Cada vez baila más cansado, gira sobre sí agonizando su inercia. Y por fin, se para. La suerte esta echada. Y sin Re, no hay Sol que brille.
A veces
si me detengo
cierro los ojos
y me siento
me descubro temblando
como una hoja de álamo
agitada por el viento
de mi miedo interno.
Yo, hombre blanco, de mediana edad o más, heterosexual, del norte global,
como co-responsable del desastre socioambiental que estamos viviendo
me pongo al servicio de movimientos sociales liderados por colectivos que
nosotros previamente hemos marginado y dejado sin poder, para, guiados por
ellxs, ya que nosotros hemos demostrado no ser capaces, encontrar una salida a
esta situación de crisis socioambiental planetaria.
Y lo hago desde una situación de retaguardia donde no se me pueda atribuir
mérito ni galardón alguno por ello, pues lo último que necesitamos, es recibir
más loas por algo que el resto de personas llevan haciendo toda la vida desde el
anonimato más absoluto basado en la invisibilización que nos beneficiaba a
nosotros.
Yo, desde este lugar que me otorga la conciencia de saberme parte del problema,
y por ello, sin capacidad para articular acciones que puedan desbloquear esta
situación, me pongo a disposición, en silencio, poniendo al servicio de dichas
acciones todas mis capacidades, recursos y conocimientos, que en definitiva,
representan como colectivo la casi totalidad del poder de esta sociedad.
Y sin más, quedo a la espera de ser llamado, y de no ser así, me mantengo en
la retaguardia, tratando de no obstaculizar el surgimiento de otros liderazgos
más legítimos en este momento.
Atentamente, un hombre cualquiera.
Alabo tu infalible diseño
y tu capacidad de sostenerte en el tiempo
a pesar de los pesares.
Agradezco tus infinitos aportes
a la ciencia y la tecnología
a la mejora de la calidad de vida
al desarrollo de las instituciones
a la publicidad y la comunicación
a la agricultura y ganadería
a la pesca y la caza
a la industria alimentaria
a la textil
a tantas y tantas áreas...
Y te lo agradezco muchísimo
sin ti no hubiésemos llegado hasta aquí
pero...
hay un nuevo sistema llamando a la puerta
como tú cuando llegaste
con un sinfín de promesas
así que quizá es el momento
de que le cedas el paso.
Prometo aportar tus enseñanzas
y no repetir lo que no ha funcionado.
Sin rencor amigo
ha sido un placer
y un gran aprendizaje.
No pasa nada por lo no conseguido
es normal, así es la vida.
Te deseo lo mejor
te envío un abrazo
y mis mejores deseos
gracias y cuídate mucho
hasta siempre capi.
Considero una necedad buscar a un Dios
omnipotente, omnipresente y omnisciente
pues si quisiera ser hallado
saldría en la tele.